Para poder disfrutar de los beneficios de las semillas de sésamo negro es necesario añadirlas a diario en la dieta. Sus efectos positivos se notan con la regularidad y no por consumir grandes cantidades de vez en cuando.
Se recomienda ingerirlas trituradas, de no ser así, se eliminan casi enteras con las heces
Se pueden comprar ya molidas o hacerlo en casa con un molinillo de café o procesadora de alimentos. Aunque son un alimento que no se oxida con facilidad, es mejor protegerlas de la luz y las altas temperaturas.
Si las molemos en un molinillo de café, poner de una vez tres cucharadas soperas de sésamo. Pasarlas después a un recipiente de cristal.
Podemos añadirlas a cualquier guiso, sopa, ensalada, incluso sobre unas tostadas, etc.
Son prácticamente insaboras, aunque algunas personas les recuerda ligeramente al sabor de la nuez si se tuestan ligeramente.
Es aconsejable tomar el equivalente a unas 2 cucharaditas cada día, o varias veces a la semana. Sino sueles tomar mucha fibra, empieza por menos y ves aumentando.
Existen 3 variedades: blancas, marrones y negras. Todas tienen muy buenas propiedades. Aunque de entre ellas, destacan las de Sésamo Negro.
Entre otros, nos aporta:
Proteínas,
fibra,
omegas 3 y omega 6
minerales como hierro, magnesio, potasio, fósforo, calcio, zinc y cobre,
vitaminas: destacan la vitamina E, y
las del Grupo B (B1, B3 y B6) y
También Tocoferoles y lignanos.
Cómo propiedades para la salud, destacan:
Protección del sistema cardíaco y circulatorio
Antioxidante
Antiinflamatorio
Ayudan a disminuir el colesterol
Mejoran el sistema digestivo
Favorecen el tránsito intestinal
Ayudan a fortalecer los huesos y las articulaciones
Previene o disminuye el dolor por artritis
Ayudan en situaciones de anemia
Mejoran el asma
Influyen positivamente en nuestra salud, así que es aconsejable incluirlas en nuestra lista de la compra.
Ampliamos un poco más ésta información.
Al tener una importante cantidad de fibra, se beneficia nuestro sistema digestivo y ayuda a equilibrar nuestro tránsito intestinal.
Tanto la energía y el metabolismo corporales, como el corazón, los músculos, la piel y otros muchos aspectos, se verán beneficiados si incluimos las semillas de sésamo en nuestra dieta.
El ácido oleico que contienen las semillas de sésamo se ha comprobado que ayuda a disminuir los niveles del colesterol conocido como ‘malo’ (LDL), al mismo tiempo que aumenta los del colesterol ‘bueno’ (HDL). Indirectamente, este ácido graso también ayuda a mantener un peso saludable.
Al consumir 2 gramos de éstas semillas al día, se ha demostrado que se reduce el colesterol hasta un 10%.
Al reducir el colesterol en las arterias, disminuyen las posibilidades de padecer hipertensión, infartos o anginas de pecho.
Al tener propiedades antioxidantes gracias a la vitamina E tiene un efecto rejuvenecedor de nuestro organismo.
Actúan como potenciadores del sistema inmune y nos protegen de ciertas enfermedades.
Uno de los aminoácidos presentes en el sésamo, el triptófano, contiene y proporciona a nuestro organismo serotonina, más conocida como la hormona de la felicidad. Esto nos ayuda a dormir mejor y controlar el estrés, la ansiedad y la fatiga. Todo ello reforzado por el efecto relajante de la vitamina B1.
Contienen magnesio que contribuye en la prevención de algunos problemas respiratorios, cómo el asma.
Todas estas orientaciones, son para personas sin ninguna patología. En caso contrario, si hay dudas consultarlo al especialista que corresponda.
Las contraindicaciones más importantes que se han detectado a raíz de consumir semillas de sésamo tienen que ver sobre todo con reacciones alérgicas.
En este sentido, si tienes alergia a algún fruto seco, y muy especialmente a los cacahuetes, lo mejor será no tomarlo. El motivo es que contienen el mismo elemento alérgeno que está presente en las semillas de sésamo.
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